Niñez no está en agenda ni para la población vulnerable ni para lxs trabajadores del sector. El caso de la Dirección de Niñez y Adolescencia de Lanús, se refleja en otros distritos del conurbano bonaerense en donde las problemáticas de pobreza y exclusión, se hacen más fuertes en niñxs y adolescentes desde hace años.
Un grupo de trabajadoras profesionales -una trabajadora social, una psicóloga, una abogada y una administrativa- conforman un equipo interdisciplinario que atiende vulnerabilidades infantiles en las barriadas del Distrito y son integrantes del servicio local, decidió no renovar su contrato por varios factores.
Luego de 3 años de trabajo intenso en el territorio y de haber renovado en varias ocasiones por el magro salario -vía monotributo, es decir facturando- de $16800 (de los cuáles con descuentos les quedarán unos 13 mil pesos) por 24 horas semanales de trabajo, decidieron romper su relación de trabajo con el municipio de Lanús.
La gota que rebalsó el vaso es el maltrato personal: hacer decidir a una embarazada de 7 meses, con una hija y único trabajo que elija si presentarse a sus tareas en la unidad sanitaria de Valentín Alsina, o renunciar, fue un golpe que tiene anclaje en el abandono y desconocimiento de las leyes de amparo laboral, obligada especialmente por la cuestión pandemia.
Hasta ése entonces, y con denuncias mediante desde hace 3 meses, habían aguantado -señala Marcela Viñuela licenciada en Trabajado Social-, maltrato personal, ninguneo -destrato-, desconocimiento técnico profesional, salarios de miseria, no ser tratadas como trabajadoras sino como prestadoras de servicios, obligadas a rotación de equipos en otros servicios locales. Estos son algunos de los motivos que denuncian fueron objeto de su cansancio y que Marcela relata en ésta entrevista.
La idea central es presentar una muestra, para que aquellxs que se vean reflejados puedan generar mejores espacios de lucha y pedido de derechos, que sea reconocida su tarea inmensa ante las complejidades que manejan, y mejore de alguna manera el servicio para el que fue generado desde la provincia de Buenos Aires y los municipio: mejorar la calidad de vida de los más vulnerables.
